Por Miguel Cruz Tejada
NUEVA YORK._ Wilson
Alejandro Mejía Velez, un sicario de un cartel colombiano de las drogas que en
1992 asesinó a tiros al reconocido periodista cubano nacido en Camaguey (Cuba),
Manuel de Dios Unanue en un restaurante de Queens y condenado a cadena
perpetua sin libertad condicional, está pidiendo que un juez anule la
sentencia, alegando que sólo tenía 17 años de edad, cuando cometió el
homicidio.
Unanue, quien fue jefe de
redacción de El Diario / La Prensa, entonces el periódico latino de mayor
influencia, era un asiduo crítico de los carteles de las drogas en Colombia, y
su asesinato se atribuyó a supuestas órdenes del asesinado capo Pablo Escobar
Gaviria.
El periodista, quien en sus
reportajes y crónicas sobre el narcotráfico nacional e internacional, en la
época más insegura para los reporteros que enfrentaban los carteles, publicaba
notas denunciando los puntos donde grupos de narcos vendían los psicotrópicos,
incluyendo fotografías.
En la época, el periodista
dominicano Ramón Urbáez, expuso más de una vez su vida, trabajando bajo la
dirección de Unanue, con repoertajes de ese contenido, que fueron publicados en
portadas del referido periódico.
En una ocasión, Urbáez, tuvo
que huir y esconderse en un suburbio de Pensilvania para protegerse de las
amenazas de los narcos.
Era la épóca más angrienta
en conexión con el creciente mercado de
la cocaína y el crack en los suburbios marginales de Nueva York.
El sicario, llegó armado al
restaurante Mesón Asturias en Queens, apovechando que Unanue, visitaba todos
los días el lugar y estaba bebiéndose una cerveza, cuando el matón apretó el
gatillo.
El asesinato conmovió a toda
la ciudad.
A Unanue, también se le
atribuyó participar en la creación de la línea caliente de denuncias del
Departamento de Policía (NYPD), “Crime Stoppers” (Alto al Crimen), lo que
también encolerizó a los carteles de las drogas.
En parte de sus reportajes,
el periodista aseguraba que muchas de las actividades más importantes,
incluyendo espectáculos en discotecas de Jackson Heighs en Queens, estaban
financiadas por los narcotraficantes.
Eso y otras denuncias, le granjearon
el odio de los capos locales e internacionales, que según el propio Unanue, lo
amenazaban de muerte, pero insistía en que no les temía.
Fue una ejecución típica de
los carteles y en presencia de muchos comensales que estaban en el mismo
restaurante en el momento del crimen.
La abogada del sicario Susan Kellman, dijo que está
pidiendo que a su cliente se le dé una segunda oportunidad y alegando que era
muy joven y que no sabía que el muerto era un reconocido periodista latino de
la ciudad.
“Es un castigo cruel e
inusual para condenar un menor de edad a
prisión de por vida sin posibilidad de
libertad condicional”, alega la abogada en una moción sometida en la Corte
Federal de Brooklyn, el viernes.
Otras apelaciones del
sicario, una de ellas en la Corte Suprema del Estado, han sido denegadas por
los jueces.
Otros menores condenados a
cadena perpetua han presentado
argumentos similares a los de Mejía Velez y no han logrado reducción de las
condenas.
Sólo en un caso, en la corte
federal de Brooklyn, tres miembros de la violenta pandilla china “Los Dragones Verdes” (Green Dragons), consiguieron
las rebajas de sus condenas a cadena perpetua.
La abogada del sicario,
busca aprovechar ese precedente para convencer a los jueces federales.
Los fiscales dicen que a
menos que el juez Edward Korman decida, Mejía Vélez obtendría el mismo plazo
utilizando las directrices actuales, y deberá ser sentenciado de nuevo.
Los documentos de la corte,
dicen que un alto líder del Cartel de
Cali ofreció una recompensa de $50.000 dólares por la cabeza del periodista.
Unanue, también descifró cómo funcionaba el cartel.
Mejía Velez fue una de
varias personas acusadas en el crimen a sangre fría, condenado por apretar el
gatillo.
El adolescente no sabía que
Unanue era un reportero, de acuerdo con sus cómplices que testificaron para la fiscalía federal a cambio de
sentencias benévolas.
El juez Korman condenó a
Mejía Vélez, cinco días después del veredicto de culpabilidad.
El magistrado rechazó en el
momento el argumento de la defensa del sicario, sobre su edad. Mejía Velez,
lleva 25 años en la cárcel.
En 2013, pidió que el
tribunal anulara su sentencia de cadena perpetua sin posibilidad de libertad
condicional, apoyándose en un dictámen de la Corte Suprema en Washington DCV, hace
un año.
“El crimen de Mejía Velez
fue deliberado, a sangre fría, y mercenario, exactamente el tipo de caso en el
que el Tribunal Supremo dijo que una sentencia de cadena perpetua sin libertad
condicional por un menor de edad fue un resultado válido”, había dicho el juez
Korman.
La abogada de Mejía Vélez,
dijo que la lucha legal en este momento es si el sicario, incluso merecía otra
frase, la cual, ella dijo, que lo hizo claramente de acuerdo con las decisiones
del Tribunal Supremo en los últimos años.
Un espacio recreativo frente
al restaurante, donde fue asesinado lleva el nombre de “Manuel de Dios Unanue
Square”.
PIE DE FOTO
NUEVA YORK._ El periodista
cubano Manuel de Dios Unanue, asesinado en 1992 en Queens. A la derecha,
orficiales forenses transportaban su cadáver a la morgue. (Fotos El Diario NY y
David Burns / AP)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Esperamos que su comentario contribuya al desarrollo de los gobiernos locales .