Por Abraham Pérez
La naturaleza nos juega en ocasiones una mala pasada, regularmente, la
mayoría de los fenómenos naturales son impredecibles, lo que los hace más
peligrosos.
La fuerza descomunal con que actúa la naturaleza es implacable. Cuando se manifiesta en sectores de alta
densidad poblacional, los costos en vidas y daños a la propiedad son
inconmensurables.
Ante el evento de un desastre en escalas alarmantes y en donde al
momento los responsables no saben administrar los recursos que se poseen para
resolver de manera efectiva y en el menor tiempo posible esa irregularidad; ahí
entra el equipo de asistencia para dar el apoyo a la emergencia, sea local,
provincial o general.
Para brindar una rápida y efectiva respuesta ante estos eventos, hay
profesionales con la capacidad y los conocimientos adecuados. Quienes están debidamente entrenados en lo
que es la administración de emergencia.
Este apoyo puede ser a corto o largo plazo, basado en las necesidades y
el nivel de respuesta ante el desastre.
Con los servicios de evaluación tanto a individuos como a las
facilidades públicas, tales como: Bibliotecas, Hospitales, Escuelas, Cuarteles
de Bomberos, Sistemas de alcantarillados, etc.
Se dispone, así como también esta asistencia para propietarios
privados de casas y negocios. Estos profesionales tienen la experiencia de
haber trabajado con el gobierno, y en instituciones privadas, en el manejo de
organizaciones de emergencias como parte de este proceso, y ejecutan sus
actividades de manera que sea lo menos traumático posible para los afectados.
Los profesionales envueltos en este ramo de tanta importancia poseen los
conocimientos en materia de sistemas de transporte, sistemas de estaciones de
bombeo e irrigación, sistemas de controles de agua, entre otros.
Debemos estar preparados para poder responder a la menor brevedad ante
un incidente de magnitud desconocida.
Luego, lo que procede es permitir el ingreso de estos equipos a las
áreas afectadas, de manera que se pueda optimizar el tiempo y obtener una
evaluación de los daños en el menor tiempo posible.
Que pretendemos con esta observación?
Que nuestro País, la Republica Dominicana, sea proactiva y esté
preparada ante situaciones de esta índole, y no que se actúe de manera
reactiva; y al momento del incidente, o al pasar este; se dediquen las autoridades
a buscar los recursos materiales y humanos para el rescate de los damnificados,
así resolver el caso de la manera acostumbrada y no para evaluar los daños y proceder con un criterio profesional para
reconstruir, restaurar y poner en valor las propiedades dañadas en un periodo
corto de tiempo.
AUTOR: Abraham Pérez, MEng, Especialista en Medioambiente y Desastres Naturales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Esperamos que su comentario contribuya al desarrollo de los gobiernos locales .