Por Paulino Antonio Reynoso
Primero quiero reivindicar un derecho que
me asiste. Perdón que hablo en primera persona, pero debo aclararle a mi
querida compañera de partido Doña Milagros Ortiz Bosch, y a los que no lo
sabían, que fui el primero en la República Dominicana que hizo pública una
propuesta de Ley de Partidos Políticos.
Esa propuesta la hice pública el 23 de diciembre del
1993 en una rueda de prensa en el local situado en la Avenida 27 de Febrero
esquina Máximo Gómez, sede principal del Movimiento Nuevo Poder. En ese momento
yo era candidato presidencial por dicho movimiento político.
Rafael Chaljub Mejía es testigo viviente de eso. Él
fue el principal impulsor de esta noble idea.
Esa propuesta se la entregamos al Presidente de la
Junta Central Electoral de entonces, encabezada por el trujillista y excluyente
funcionario Manuel García Lizardo y a todos los principales dirigentes de los
partidos políticos existentes en ese momento.
Después de entregar nuestra propuesta, que en ese
momento no era más que un bosquejo general, fuimos a varios medios de
comunicación y explicamos el alcance y la importancia de esta nueva ley.
Pero no olvidemos que después de las elecciones del
16 de mayo del 1994, en las que fui candidato presidencial, el país vivió unos
meses de crisis que nos mantuvo al borde de un caos general.
Fue cuando se firmó el Pacto por la Democracia, que
aunque hubo significativos advances, fue el resultado de la intervención de
sectores muy conservadores y que tenían la firme decisión de obstaculizarle el
camino hacia el Palacio Nacional a José Francisco Peña Gómez. Monseñor Agripino
Núñez Collado, el Cardenal López Rodríguez, sectores empresariales, los Estados
Unidos, entre otros, estaban al frente de esas escaramuzas contra el PRD de
entonces.
De ahí que nuestra propuesta por una ley de partidos
y agrupaciones políticas sufrió un gran tropiezo. Todos nos enfocamos en la
solución de la crisis y en las elecciones que debían celebrarse en dos años por
disposición constitucional.
Después de todos esos años de lucha, el partido
oficial, la Corporación Económica llamada PLD, acaba de aprobar un mamotreto de
ley de partidos y agrupaciones políticas, ajustada a sus conveniencias
políticas.
Aquí vienen los gritos de Jeremías de que tanto se
habla. Jeremías lamenta la destrucción de Jerusalén en su soledad. Estuvo
llorando entre las cenizas. ¿Por qué había sido destruida la ciudad? La ciudad
había pecado.
¿Qué pasó que el PRD, con mayoría en el Congreso
desde el 1998 hasta el 2006, no aprobó esa ley de partidos que ya cursaba en el
congreso? ¿Por qué si el sistema de partidos lo reclamaba para ser adecentado
el PRD no tuvo la valentía de aprobarla? Ahora que el PLD aprobó un mamotreto
estamos gritando y acusándolo?
Esa es una gran lección para la clase política
dominicana, pero muy especial para el Partido Revolucionario Moderno (PRM).
Dejarse conducir por miopes, por mercaderes de la política y por intereses de
grupos nos conduce al abismo. Hay errores que no se deben repetir.
Hoy lloramos como niños lo que no supimos defender
como hombres.
Tuvimos personas en el Congreso con un profundo
deseo de servirle a la Patria. Pero también tuvimos antipatriotas, mezquinos y
comecheques que nos han hecho un gran mal a todos.
Así pasó con la propuesta que hicimos sobre tránsito
y transporte. Incluso, el presidente Hipólito Mejía la envió al Senado para
aprobarse después de haber sido consensuada. Pero a los senadores no les dio
las ganas de hacerlo. Eso no daba comisiones. Los que estábamos preocupados
para que se aprobara esta importante ley, no dábamos dinero.
Sin embargo, algunos legisladores nuestros sí
estaban de acuerdo y dieron sus votos a fin de que se privatizaran las empresas
del Estado. Eso sí daba resultados financieros.
Acaecidos estos percances, solo nos queda la
esperanza de que el PRM no cometa los mismos graves errores que cometió el PRD.
Después de todo, en medio de estos gritos, cabe
preguntarse: ¿Qué se podía esperar de un partido cuyos principales dirigentes
están siendo acusados de graves actos de corrupción y de haber manejado dinero
de narcotraficantes confesos?
El autor es dirigente político y escritor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Esperamos que su comentario contribuya al desarrollo de los gobiernos locales .