Por Miguel Cruz Tejada
NUEVA YORK._ El reconocido
abogado experto en casos federales de gran resonancia y contratado por el capo
mexicano de las drogas Joaquín Archivaldo Guzmán Loera, preso en el Centro
Metropolitano de Corrección en Brooklyn,
donde estuvo Quirino, Jeffrey Litchman, aseguró anoche que él ni los demás
juristas del equipo de la defensa del mexicano, no cobrarán un centavo, si la corte
prueba que el dinero del acusado, proviene del narcotráfico.
La declaración del jurista
es en respuesta a una advertencia del juez de que El Chapo no puede contratar
abogados privados, porque su dinero es producto del narcotráfico.
El abogado, habló ayer con
una batería de medios locales frente a la cárcel federal, diciendo que sometió
varias mociones al juez del caso, sugirió que le apasiona más lograr la
libertad por inocencia de El Chapo, que la suma que cobraría.
Litchman, quien se refirió
al voluminoso expediente, con más de 10.000 grabaciones de audio y 1.500
páginas de documentos escritos, dijo que “este es un caso muy difícil”.
El jurista sostuvo que por
un lado está la prensa, “que en su
juicio particular, ya lo ha condenado varias veces”.
Añadió que otros de los
problemas es la salud de El Chapo, que se está deteriorando progresivamente.
“Tenemos que manejar a un
cliente que está deteriorándose rápidamente y a una fiscalía que atrasa este
proceso, y no asegura que no congelará el sueldo”, dijo el jurista.
El abogado informó que desde
El Chapo fue extraditado de México a Nueva York, se ha reunido 30 veces con el
reo.
Un eventual juicio, en caso
de que el capo no se declara culpable, haciendo un acuerdo con los fiscales federales, podría ser fechado
para 2018.
En las reuniones con El
Chapo, el jurista ha discutido con el
acusado las posibles estrategias de su defensa.
“Él es muy inteligente y se
acuerda todo lo que hemos discutido”, dijo el abogado refiriéndose a El Chapo.
También dijo que el capo
mexicano goza de muy buen humor.
“Yo sé lo que la gente
piensa: que El Chapo habría matado a un millón de personas y es el peor
narcotraficante, pero como abogado, no me puedo llevar de lo que dice la
gente”, agregó el jurista.
El Chapo, último líder del
Cartel de Sinaloa, rechazó los abogados de oficio que le asignó el Gobierno de
Estados Unidos y decidió contratar una defensa privada que está encabezada por
Litchman.
El jurista tiene en su
haber, haber logrado la exoneración de John Gotti Junior, hijo de uno de los
mafiosos más célebres del mundo y acusado por docenas de cargos, incluyendo
narcotráfico y asesinatos.
“Me da más miedo el Gobierno
que mis clientes. Nunca he tenido problemas o me he sentido amenazado por
ellos, que aprecian a un representante legal trabajador”, dijo Litchman.
El Chapo, está acusado de 17
cargos relacionados con el narcotráfico
y actividades delictivas colaterales, según los fiscales federales de Brooklyn.
De ser hallado culpable, se
enfrenta a una condena de cadena perpetua.
El abogado se quejó de que
El Chapo no tiene relación con su familia y no ha podido ver a su hija, que es
una de las principales preocupaciones de su esposa y otros familiares.
El Chapo fue extraditado a
Estados Unidos a mediados de enero en medio de un espectacular aparataje de
seguridad, que incluyó agentes de la DEA y la policía migratoria (ICE).
A su llegada a Nueva York y
mientras conversaba esposado con una policía hispana, fue fotografiado con un
refresco en lata en la mano y la imagen fue subida a las redes sociales y en la
cuenta twitter de la policía de la ciudad.
PIE DE FOTO
El abogado de El Chapo,
Jeffrey Litchman, asegura que no cobrará un
centavo si se prueba que el dinero proviene de las drogas. A la derecha,
el capo en una foto tomada en la cárcel a su llegada a NY. (Fotos Hamodia y
NYPD)
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