SANTO DOMINGO, R. D.- El ex procurador
general de la República, Radhamés Jiménez, está impulsando acciones de amparo
ante el Tribunal Superior Administrativo (TSA) y ante el Tribunal Superior
Electoral (TSE), en procura de que jueces que son seguidores del ex presidente
Leonel Fernández, dicten una sentencia antes de la reunión del Comité Político
del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) que dificulte un eventual proceso
de reforma constitucional.
Para tal propósito se ha valido de los señores Trajano Vidal
Potentini, a nombre de la Fundación Justicia y Transparencia y de Ángel
Lockward que sometieron recursos de amparo preventivos en los mencionados
tribunales para impedir la modificación de la Constitución.
Jiménez realiza una intensa actividad de cabildeo y presión a
los jueces de los Tribunales Superior Administrativo y Superior Electoral para
que fallen antes de la reunión del Comité Político del PLD.
A tales fines, el domingo pasado, en declaraciones públicas
ofrecidas a un medio de comunicación, Jiménez marcó la pauta que entiende deben
seguir los jueces, al asegurar que para establecer la reelección es
imprescindible un referendum aprobatorio basado en una interpretación
antojadiza del artículo 272 de la Constitución que dice: “Cuando la reforma
verse sobre derechos, garantías fundamentales y deberes, el ordenamiento
territorial y municipal, el régimen de nacionalidad, ciudadanía y extranjería,
el régimen de la moneda, y sobre los procedimientos de reforma instituidos en
esta Constitución, requerirá de la ratificación de la mayoría de los ciudadanos
y ciudadanas con derecho electoral, en referendo aprobatorio convocado al
efecto por la Junta Central Electoral, una vez votada y aprobada por la
Asamblea Nacional Revisora”.
Posición a la cual se adhirió sorprendentemente este miércoles Roberto
Rosario, presidente
de la Junta Central Electoral (JCE), quien se supone debe ser el árbitro de
todo el proceso electoral.
Este cabildeo y esta presión de Radhamés Jiménez es un claro y
temerario despropósito que conspira contra la voluntad del pueblo dominicano y
la paz pública, y que pretende dar un palo acechao y abortar la reunión del
Comité Político del Partido de la Liberación Dominicana programada para este
domingo 19 de abril en Juan Dolio.
Quieren dar palo acechao a reunión CP-PLD y al pueblo dominicano
con sentencias en tribunales.
El ex procurador general de la República, Radhamés Jiménez, está
impulsando acciones de amparo ante el Tribunal Superior Administrativo (TSA) y
ante el Tribunal Superior Electoral (TSE), en procura de que jueces que son
seguidores del ex presidente Leonel Fernández, dicten una sentencia antes de la
reunión del Comité Político del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) que
dificulte un eventual proceso de reforma constitucional.
Para tal propósito se ha valido de los señores Trajano Vidal
Potentini, a nombre de la Fundación Justicia y Transparencia y de Ángel
Lockward que sometieron recursos de amparo preventivos en los mencionados
tribunales para impedir la modificación de la Constitución.
Jiménez realiza una intensa actividad de cabildeo y presión a
los jueces de los tribunales Superior Administrativo y Superior Electoral para
que fallen antes de la reunión del Comité Político del PLD.
A tales fines, el domingo pasado, en declaraciones públicas
ofrecidas a un medio de comunicación, Jiménez marcó la pauta que entiende deben
seguir los jueces, al asegurar que para establecer la reelección es
imprescindible un referendum aprobatorio basado en una interpretación
antojadiza del artículo 272 de la Constitución que dice: “Cuando la reforma
verse sobre derechos, garantías fundamentales y deberes, el ordenamiento
territorial y municipal, el régimen de nacionalidad, ciudadanía y extranjería,
el régimen de la moneda, y sobre los procedimientos de reforma instituidos en
esta Constitución, requerirá de la ratificación de la mayoría de los ciudadanos
y ciudadanas con derecho electoral, en referendo aprobatorio convocado al
efecto por la Junta Central Electoral, una vez votada y aprobada por la
Asamblea Nacional Revisora”.
Posición a la cual se adhirió sorprendentemente este miércoles Roberto
Rosario, presidente de la Junta Central Electoral (JCE), quien se supone
debe ser el árbitro de todo el proceso electoral.
Este cabildeo y esta presión de Radhamés Jiménez es un claro y
temerario despropósito que conspira contra la voluntad del pueblo dominicano y
la paz pública, y que pretende dar un palo acechao y abortar la reunión del
Comité Político del Partido de la Liberación Dominicana programada para este domingo
19 de abril en Juan Dolio.
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