Por Víctor Gómez.
Un candidato a la asamblea estatal marcado
por tener una sospecha de alto número de votantes registrados en su apartamento
de Manhattan dice que es "patético" que alguien lo acusara de mala
conducta.
Manny De Los Santos, un trabajador social
y operativa Democrática, quiere el asiento dejado abierto por la ex
asambleísta Gabriela Rosa, quien renunció el mes pasado después de
declararse culpable de haber cometido actos de fraude matrimonial.
Este aspirante aparece en una queja
acerca de un supuesto "almacenaje" de votantes por una docena
de personas con un número sorprendentemente grande de los solicitantes de
registro en sus apartamentos y edificios, o ambos, según una fuente.
La Junta se ha referido a la denuncia de
las agencias, incluyendo la oficina del Fiscal General del estado, de, el
fiscal de distrito de Manhattan, y el Departamento de Investigaciones.
De Los Santos, es un aliado del senador
estatal Adriano Espaillat. Inicialmente se consideró candidato al puesto de
Espaillat - un plan que fracasó cuando el senador estatal perdió su segundo
reto ante para el representante Charles Rangel y decidió postularse para el
Senado de nuevo.
Registros del directorio muestran seis votantes
que figuran en el apartamento de De Los Santos en Wadsworth Avenue en Manhattan
- incluyendo dos personas llamadas Manuel A. De Los Santos, nacido apenas un
mes de diferencia en 1948.
El candidato le dijo al Daily News en una
entrevista reciente que " sus padres antiguamente vivían en la casa, pero
se mudaron al Bronx sin actualizar su registro de votante".
"No puedo obligarlos a cambiar su
dirección," dijo sobre sus padres. "No fue algo que se hizo a
propósito." Ahora, dice, vive allí con su esposa y su hijo de 3 años de
edad".
De Los Santos dijo que no estaba seguro de
quién es el sexto de los votantes registrados en el hogar podría ser, pero
insistió en que "no es inusual" tener cinco votantes en los libros y
que el demandante no está "tratando de provocar" a él,
Yo no voy a bajar a su nivel", dijo.
Funcionarios de la Junta no quisieron
hacer comentarios sobre el caso, excepto para decir que se refieren las
denuncias de fraude electoral a las autoridades como una cuestión de rutina.
Para el asiento dejado por Gabriela,
también está en la mira Guillermo Linares, quien ocupado el cargo desde 2011
hasta 2013 y se desempeñó anteriormente en el consejo municipal.
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